Carlos Sanabria, secretario general de la Asociación de Empleados Fiscales e Ingresos Públicos (AEFIP) seccional Resistencia, expresó su preocupación y descontento con el proceso de transformación de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en la nueva Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), impulsado por el Gobierno nacional.
Sanabria señaló en 7AM que, aunque la AFIP sigue operando con normalidad, la transición al nuevo organismo generó incertidumbre entre los empleados y podría tener graves consecuencias laborales.
Según Sanabria, el personal de AFIP se encuentra en medio de una conciliación obligatoria tras el anuncio del Gobierno de reestructurar el organismo y trasladar sus bienes y sistemas a la ARCA.
Aunque hubo una reunión inicial en el Ministerio de Trabajo, no se brindaron detalles claros sobre el futuro del personal ni sobre el nuevo organigrama. "Estamos en la misma incertidumbre de siempre", afirmó Sanabria, resaltando que el decreto 953 otorga un plazo de 60 días para implementar la reconversión, sin aclarar el alcance de los cambios o cómo afectarán a los trabajadores.
Uno de los temas más preocupantes es la posible reducción de personal, ya que Sanabria indicó que se rumorea la eliminación de 3.155 puestos de trabajo a nivel nacional, lo cual implicaría una disminución significativa en la plantilla de empleados.
Esta situación se vio agravada por una "merma vegetativa" en el organismo, que experimenta un aumento en las jubilaciones: solo en octubre se registraron 350 solicitudes de retiro en el país, lo que genera vacíos en áreas críticas. “No nos sobra ningún empleado. Tenemos menos gente que en 2019, y cada vez es más difícil sostener el trabajo con tantos retiros y jubilaciones”, enfatizó.
Sanabria también señaló que, aunque los trabajadores cumplen con la conciliación obligatoria, la patronal no aclaró cómo se implementará la reestructuración ni cuál será el destino de los actuales empleados de la AFIP.
La próxima reunión está prevista para el martes 12 de noviembre en Buenos Aires, donde esperan obtener más información y aclarar la situación de los empleados afectados por este proceso de reconversión.
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