El gobernador Jorge Capitanich anunció en la mañana de hoy el nacimiento de dos cachorros de yaguaretes en el Parque Nacional El Impenetrable ubicado sobre territorio chaqueño. Las crías del felino, el cual se encuentra en peligro de extinción, es fruto de la unión de Qaramta, un macho silvestre de unos 5 años y Tania, una hembra de cautiverio de 9.
El gobernador, quien estuvo acompañado de Sofía Heinonen, directora ejecutiva de la Fundación Rewilding Argentina, de la secretaria de Desarrollo Territorial y Ambiente, Marta Soneira y del presidente del Instituto Cultura, Ariel Ibarra, destacó el hecho al que señaló como histórico. “El yaguareté es un símbolo de nuestra identidad de El Impenetrable”.
Por su parte, Heinoenen aseguró que el hecho de haber cruzado a dos especies, una de ellas salvajes “fue innovador”. Detalló que el hecho “conllevó un montón de decisiones con una comisión que avaló poder unir una especie de silvestre con una especie de zoológico”.
Explicó que esto difiere de lo sucedido en el Parque Iberá en donde ambas especies venían de zoológicos y era todo controlado. “Acá intentamos algo de mucho riesgo y los resultados aceleran el tiempo de lo sucedido en Iberá, porque ya tenemos un bicho silvestre y por ende tenemos la mitad del problema resuelto”, explicó.
“Tengo la esperanza de que en cinco años estemos más avanzados incluso que lo que sucede en Iberá ya que si pudiéramos reproducir más hembras y poder liberarlas con cachorros, es el resultado sel mecanismo más efectivo para anclarlos y por ende replicarlo más rápido en El Impenetrable, sobre todo teniendo en cuenta que en el Chaco tenemos ejemplares silvestres”, dijo la bióloga.
A su vez destacó el compromiso del Gobierno del Chaco al cual señaló como “lo más importante ya que si los ciudadanos y las autoridades tienen una visión certera, como la que se tiene desde el 2012, esto es factible y se ha probado que tiene resultados concretos”.
Respecto al estado de salud de las crías y su crianza, la representante de la Fundación en la provincia detalló que van a permanecer en corrales “muy grandes con la protección debida ya que hay que alimentarlos con presas vivas y que nunca tengan contacto con humanos, cosa de que podamos liberarlo en 2 años”.
