
El viernes el Gobierno tiene una sesión clave en el Senado. Pone en juego su proyecto de Presupuesto 2026 y su iniciativa de reforma del Régimen Penal Tributario (denominada Presunción de Inocencia Fiscal) pero, más aún, busca garantizarse un envión político: un triunfo podría iniciar una tendencia similar al del Congreso del 2024, cuando los dudosos siempre respaldaban sus propuestas, pero una derrota la puede tornar similar al de este año, cuando la oposición construyó una mayoría con agenda propia. Todo parece definirse en el artículo 30.
Ese apartado define la derogación de leyes que fijan mínimos de partidas presupuestarias a la educación y la ciencia.
Entre sus reformas, remueve un párrafo de la Ley de Educación Nacional que establece un 6% como piso de inversión en todos los niveles del sistema educativo, en simultáneo a que elimina de la Ley Nº 27.614 el criterio de progresividad que debe tener el área de ciencia y tecnología hasta alcanzar el 1% del PBI en el 2032.
Además le pone fin al Fondo Nacional para la Educación Técnico Profesional, compuesto por un 0,2% de los Ingresos Corrientes, y al Fondo Nacional de Defensa, que representa un 0,8% de los Ingresos Corrientes.
Los argumentos del Gobierno nacional son que esas partidas educativas nunca fueron cubiertas por las pasadas gestiones y que la composición del Presupuesto deben tener una cualidad dinámica.
Desde el peronismo, en cambio, señalan que la iniciativa quiebra el principio de no regresividad de las normas (es decir, que no se puede dar marcha atrás a una garantía o derecho establecido por ley) y que altera sectores claves para el desarrollo de cualquier economía nacional.
Es por eso que convocaron este lunes a una conferencia de prensa junto a estudiantes y dirigentes vinculados a la Educación Técnica, cuyo financiamiento según CEPA caería 93% en términos reales con respecto a lo ejecutado en 2023 de aprobarse la redacción oficialista.
La actividad del justicialismo sólo acentúo algo que La Libertad Avanza ya advertía: luego de que se caiga el capítulo 11 en Diputados (que derogaba también la Ley de Financiamiento Universitario, entre otras propuestas), el objetivo es blindar ese artículo.
Ya no se trata del equilibrio fiscal: de modificarse cualquier elemento de la redacción del Presupuesto 2026, el proyecto deberá regresar a Diputados, que tendrá sólo dos días para dictaminar y aprobar la iniciativa antes del fin de las sesiones extraordinarias, fechada para la medianoche del 30 de diciembre.
Desde el oficialismo aseguran ya haber comprado pasajes de avión abiertos para los representantes provinciales en caso de que tengan que llegar a Capital Federal de urgencia.
El Senado estrenará su nueva composición en una sesión el 26 de diciembre.
Con el objetivo de alcanzar los 37 votos en el Senado, La Libertad Avanza (21 bancas, con la incorporación del rionegrino Enzo Fullone en reemplazo de Lorena Villaverde) convocó a una llamada virtual a una serie de senadores dialoguistas.
De ese encuentro no se llevó la certeza de tener todos los respaldos para el artículo 30 y pone el ojo especialmente en la posibilidad de las abstenciones masivas, además de la dinámica de votación: en la oposición se ilusionan con modificar la definición por capítulos como fue en Diputados.
Fuente: Ámbito
