El Papa Francisco participó de la Misa de Pascuas, mientras atraviesa la recuperación de una neumonía bilateral que lo mantuvo internado más de 30 días.
El jefe de la Iglesia Católica estuvo en el balcón de la logia central de la basílica de San Pedro para la bendición Urbi et Orbi, luego de la misa del Domingo de Resurrección.
Francisco I, de 88 años, se presentó ante los miles de fieles, sin hacer uso de cánulas nasales para el oxígeno, en este Domingo de Resurrección. "Felices pascuas", celebró.
En las festividades, el sumo pontífice, pidió a Diego Ravelli, maestro de ceremonias, la lectura del mensaje de las pascuas, ante los más de 30 mil feligreses que se acercaron a la plaza de la basílica. Además, la misa estuvo oficiada por el cardenal Ángelo Comastri.
En su discurso, Francisco hizo mención sobre el alto al fuego en Gaza, al mismo tiempo que advirtió sobre la creciente crisis humanitaria en esa región. Asimismo, hizo mención de un preocupante aumento de la intolerancia contra el antisemitismo.
"La paz tampoco es posible sin un verdadero desarme. La exigencia que cada pueblo tiene de proveer a su propia defensa no puede transformarse en una carrera general al rearme".