Gabriel Boric se conviritió este viernes en el presidente más joven de Chile, a sus 36 años, al prometer el cargo ante el presidente del Senado, el socialista Álvaro Elizalde, en una ceremonia de cambio de mando celebrada en el Congreso Nacional en la ciudad portuaria de Valparaíso.

"Ante el pueblo y los pueblos de Chile, sí prometo", señaló Boric en la ceremonia, celebrada al mediodía en el Salón de Honor, en la que estuvieron presentes el mandatario saliente, Sebastián Piñera, los integrantes del futuro gabinete, el parlamento en pleno, mandatarios y autoridades de otros países, entre ellos Alberto Fernández, así como representantes de pueblos originarios y autoridades militares y eclesiásticas.

Fiel a su estilo, sin corbata y visiblemente emocionado, Boric recibió la banda presidencial de manos de Elizalde y, tras un abrazo con Piñera, entonó el himno nacional en medio de una ovación de los presentes en el recinto.

Posteriormente, Piñera se despidió y se retiró del recinto junto a todo su equipo ministerial. Al llegar a la calle, y con fuerte contraste de lo ocurrido en el hemiciclo, el ahora ex mandatario fue despedido con insultos de manifestantes en las calles.

Luego Boric tomó el juramento a su gabinete de 24 miembros, compuesto por 14 mujeres, empezando por Izkia Siches, la primera ministra del Interior en la historia del país.

El nuevo mandatario expresó su orgullo y "profunda satisfacción" por el componente mayoritariamente femenino del grupo y su acento feminista.

"No olvidemos nunca que nos debemos al pueblo de Chile", dijo, antes de preguntar: "¿Jurais o prometéis ejercer sus cargos bajo esa conciencia?".

Fuente: Telam


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