El chaqueño será parte del seleccionado nacional que competirá en Suiza entre el 27 de junio y el 6 de julio. "El deporte es la segunda medicina del ser humano", afirmó en La Mañana de Natagalá
A los 80 años, Alejandro "Puma" Pirota se prepara para vivir una nueva experiencia mundialista, esta vez en Suiza, como parte de la Selección Argentina de Maxi Básquet en la categoría mayores de 80 años. El certamen se disputará del 27 de junio al 6 de julio, y contará con la participación de equipos de Australia, Estados Unidos, Alemania, Uruguay, Brasil, Chile y la Argentina.
Pirota, símbolo del básquet chaqueño, repasó su extensa trayectoria y compartió su filosofía de vida: “el deporte es la segunda medicina del ser humano. La primera son nuestros médicos, y la segunda somos nosotros. Cuanto más deporte hagamos, más sanos vamos a ser”.
“Yo no dejé nunca de jugar”, enfatizó. “Dejé el nivel federativo, pero seguí. Fui campeón mundial en 1991 en Buenos Aires y el año pasado ganamos el Panamericano en Paraná, ganándole a Brasil 51 a 50”, recordó con orgullo.
El Puma se inició en el club Hindú de Resistencia a los 7 años, donde —dice— encontró su casa y su identidad deportiva. A los 15 ya estaba en primera, y más tarde, durante el servicio militar en los Granaderos a Caballo, jugó dos años en Boca Juniors, con quien fue campeón en 1966 y 1967. “Después me iba a ir a Venezuela a jugar en las Panteras de Táchira, pero mi padre ya estaba grande y me quedé. Así nació mi negocio de repuestos en 1968”, relató.
Durante la entrevista, Pirota destacó el valor colectivo de sus logros. “No son títulos míos. Todo se gana en conjunto, con el equipo y con la camiseta. Cada vez que salía del Chaco, muchos decían 'ah, el Chaco está lejos'. No. El Chaco es mi Argentina, es mi pueblo, es mi representación. Yo defiendo mi bandera”.
Sobre el próximo Mundial en Suiza, el Puma anticipó que el equipo nacional se está entrenando en distintas ciudades del país y que el debut será ante Australia. “En la cancha tenemos 20 años de nuevo.
Después nos abrazamos, pero en el juego nadie regala nada”, sostuvo entre risas. Incluso reveló que ya se anunció una categoría +85 para próximos torneos. ¿Jugará? “Y… si estoy bien, ¿por qué voy a dejar? ¿Qué voy a hacer?”.
Consultado sobre cómo cuida su cuerpo a esta edad para seguir compitiendo, Pirota fue contundente: “cuando entrás a la cancha te olvidás de todo, ya no duele nada. Todavía andamos”.
El Puma es ejemplo de vitalidad y compromiso con el deporte. Y cuando se le preguntó cuál fue su logro más importante, no dudó: “haber sido campeón argentino con Chaco. Porque nací y me crié acá. Eso es tener la condición moral y ética de saber defender los valores del lugar donde uno es”.
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