Un equipo de cazadores de naufragios descubrió los restos del submarino británico HMS Trooper, desaparecido desde 1943 con 64 tripulantes a bordo.
Utilizando tecnología de sonar avanzada, los investigadores localizaron el navío a 250 metros de profundidad cerca de la isla griega de Donoussa. La investigación sugiere que el submarino sufrió un hundimiento violento, posiblemente debido a una mina submarina alemana.
Un hallazgo que resuelve un misterio de 80 años
El submarino HMS Trooper, parte de la Marina Real Británica, desapareció en 1943 mientras patrullaba el mar Egeo, una región estratégica durante la Segunda Guerra Mundial. Bajo el mando del teniente John S. Wraith, nunca llegó a su destino en Beirut, lo que generó décadas de especulaciones y búsquedas fallidas.
El hallazgo del casco del submarino, partido en tres partes, sugiere que la causa de su hundimiento fue una mina submarina alemana, según el líder de la expedición, Kostas Thoctarides.
El mar de Ícaro, conocido por sus fuertes corrientes y vientos, complicó tanto la búsqueda del Trooper como su misión original. Antes de desaparecer, el submarino completó una operación secreta desembarcando agentes y suministros en la isla de Eubea.
Posteriormente, debía patrullar el Dodecaneso, una zona plagada de minas enemigas, lo que finalmente llevó a su desaparición.
Por décadas, la búsqueda del HMS Trooper estuvo marcada por errores, incluyendo un malentendido basado en el testimonio del teniente comandante Adrian Seligman.
Sin embargo, revisiones recientes de archivos militares alemanes llevaron la búsqueda al lugar correcto. El descubrimiento del submarino no solo resuelve un antiguo misterio, sino que también ofrece un cierre a las familias de los 64 tripulantes que perecieron.
Fuente: Infobae.