En 7AM, el integrante del Consejo de la Magistratura, Sergio Bosch, se refirió a la decisión que tomó el organismo respecto de la jueza Teresita Fanta, cuyo caso tomó trascendencia pública en los últimos días. Bosch explicó que la función del Consejo, cuando actúa como jurado de enjuiciamiento, no es aplicar sanciones sino decidir si una persona está en condiciones de continuar en el ejercicio de la magistratura.
"La gente no tiene mayor conocimiento de cómo funciona el Consejo, pero tiene derecho a saberlo. No se trata de una sanción propiamente dicha.
Se evalúa si un funcionario, en este caso una jueza, conserva la confianza pública para ejercer el cargo", afirmó Bosch. Y agregó: "si no conserva esa confianza, tampoco puede ejercer ningún otro cargo público. Por eso, además de la destitución, se puede aplicar una inhabilitación por hasta 10 años, que fue lo que se decidió en este caso".
Respecto de las críticas que surgieron por la posibilidad de que la exjueza pueda jubilarse, Bosch fue categórico: "el Consejo no tiene ninguna competencia sobre eso. La jubilación la otorga el INSSSEP si se cumplen los requisitos de edad y aportes. Y tampoco podemos interferir en trámites por incapacidad".
Consultado sobre las eventuales responsabilidades penales o civiles que podría enfrentar la exmagistrada ahora destituida, Bosch confirmó que "sí, totalmente. Una vez que pierde sus fueros, puede ser denunciada y juzgada como cualquier ciudadano. Los fueros no son un superpoder, son una garantía para ejercer la función sin temor a represalias".
Finalmente, al ser preguntado sobre posibles abusos de los fueros por parte de otros funcionarios, como los legisladores, Bosch reflexionó: "de todo poder se puede abusar. Como dijo el tío de l Hombre Araña: un gran poder implica una gran responsabilidad".
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